Para la crema de anacardos | |
70 g | Anacardos, ¿crudos, eco? (cajús) |
125 ml | Agua potable (125 g) |
1 cda. | Tomillo fresco (2,4 g) |
1 pizca | Nuez moscada, molida o rallada (0,1 g) |
½ cdta. | Sal de mesa (3 g) |
½ cdta. molida | Especias, pimienta negra (1,2 g) |
2 cdas. | Cocos rallados, sin azúcar (16 g) |
Para el gratinado | |
1 kg | Zanahoria, cruda (1'000 g) |
10 g | Jengibre crudo |
2 cdas. | Aguamiel (23 g) |
½ cdta. | Aceite de canola, refinado (ecológico?) (2,2 g) |
3 ramillete | Perejil, fresco (3 g) |
15 hojas | Hierbabuena, fresca (2,2 g) |
Para la crema de anacardos
Poner los anacardos en remojo por la noche y dejarlos entre ocho y doce horas para que se ablanden.
Si no tiene tiempo para ello, puede saltarse este paso. Sin embargo, poner los anacardos en remojo no solo aporta beneficios nutricionales, sino que también ayuda a que la crema adquiera la consistencia adecuada.
Enjuagar los anacardos con agua limpia y triturarlos con 125 ml de agua. Agregar un poco más de agua hasta conseguir que la crema de anacardos tenga una consistencia espesa.
Añadir tomillo y nuez moscada a la crema y salpimentarla. Incorporar el coco rallado y mezclar.
La cantidad de sal y pimienta puede variar según el gusto de los comensales, pero cuanto menos se utilice, mejor.
Para el gratinado
Pelar las zanahorias y el jengibre. Cortar las zanahorias en láminas muy finas. Rallar el jengibre y mezclarlo con el sirope de agave.
Precalentar el horno a 180 ºC. Untar una fuente de horno con aceite y colocar las láminas de zanahoria como si fueran tejas. Rociarlas con el sirope de agave y jengibre.
Verter la crema de anacardos y coco e introducir la bandeja en el horno a una altura media durante 30 minutos aproximadamente, hasta que la superficie esté ligeramente dorada.
Picar las hierbas frescas muy finas y espolvorearlas sobre el gratinado de zanahoria. Servir a continuación.
Este gratinado de zanahoria con hierbas frescas no solo es muy sabroso, sino también muy nutritivo.
Zanahorias y vitamina A: las zanahorias son una de las verduras más bajas en calorías. Son especialmente ricas en caroteno, un precursor de la vitamina A al que también deben su típico color anaranjado. La vitamina A es importante, no solo para nuestro sentido de la vista, sino también para el sistema inmunológico.
Conservación de las zanahorias: para que las zanahorias se conserven mejor en la nevera se recomienda retirarles el tallo y las hojas verdes y sacarlas del envoltorio de plástico.
Otras hierbas aromáticas: en lugar de perejil y hierbabuena, es posible utilizar únicamente perejil u otra combinación de hierbas frescas a su gusto.
Edulcorantes alternativos: para sustituir el sirope de agave puede utilizar miel. La miel de acacia sería una buena opción en este caso.