60 g | Anacardos, ¿crudos, eco? (cajús) |
80 ml | Agua potable (80 g) |
⅛ | Limón, crudo, sin cáscara (7,2 g) |
Poner los anacardos en remojo con abundante agua durante al menos cuatro horas.
Si se tiene prisa, este paso se puede omitir excepcionalmente. Además de los beneficios nutricionales (consulte los consejos de la derecha), dejar remojar los anacardos aporta una consistencia especialmente cremosa al yogur.
Escurrir los anacardos con un colador y enjuagarlos con agua. Mezclar en una batidora de vaso con 80 ml de agua.
Se recomienda utilizar una batidora de vaso potente.
Mezclar a la velocidad máxima hasta obtener una crema suave y fina.
Este proceso puede durar varios minutos. Vuelva a introducir en la mezcla los trozos de frutos secos que son despedidos hacia la parte superior del vaso.
Añadir unas gotitas de zumo de limón para darle sabor.
Esta crema similar al yogur puede ser el ingrediente base de multitud de recetas. El yogur de anacardos no suele ser crudivegano.
Alternativas al yogur: el yogur tradicional es un producto lácteo que se obtiene de la fermentación de la leche.
En cuanto a la consistencia cremosa, esta versión vegana no tiene nada que envidiar al original. El yogur de anacardo es rico en triptófano, un aminoácido esencial.
Actualmente, en el mercado hay numerosas alternativas al yogur —todas ellas elaboradas a partir de soja— aunque la mayoría han sufrido varios procesos industriales y contienen aditivos como los estabilizadores, colorantes y azúcares. Los yogures alternativos, por lo general, se elaboran mediante la fermentación de cultivos lácticos, al igual que los originales.
Cultivos lácticos: el zumo de limón acidifica el yogur de anacardos que aquí presentamos y consigue imitar la fermentación. Se trata de una solución de lo más rápida y sencilla. No obstante, aquellos aventureros que tengan tiempo suficiente, pueden añadir cultivos lácticos al yogur de anacardos en lugar de zumo de limón. Los cultivos lácticos se pueden comprar listos para su uso.
Los anacardos no suelen ser crudiveganos: casi siempre sufren un proceso de calentamiento, incluso aunque en el envase figure que son crudos. Esto casi siempre implica que la sustancia tóxica cardol se ha desactivado mediante vapor en lugar de tueste. Solo consideraremos que el fruto seco es un alimento crudivengano si el procedimiento está controlado y explicado al detalle.
Conservar en frío: después de la elaboración y antes de su consumo, conservar en un lugar frío para realzar el efecto de la frescura.
Uso del yogur: el yogur de anacardos es perfecto como base de yogur con fruta o muesli. Según los gustos, se puede añadir vainilla, una esencia que combina muy bien con esta mezcla.
También se puede añadir para refrescar platos salados.
Consistencia: la cantidad de agua determina la posterior consistencia del yogur, de modo que, si añade algo más de agua, el resultado será una especie de nata líquida. La nata líquida es ideal para rebajar salsas, sopas o aderezos. En este caso, el aderezo de limón es opcional.