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Ácido eicosapentaenoico; EPA; 20:5 omega-3

El ácido eicosapentaenoico, EPA, es un ácido graso omega-3. Es la base de DHA y precursor de los eicosanoides. Se sintetiza a partir del ácido alfa-linolénico.

Conclusión:

Veganos y vegetarianos consumen demasiados ácidos grasos omega-6 a través de los aceites de cocina. La proporción en relación con los ácidos grasos omega-3 es incluso peor que en aquellas personas que siguen dietas mixtas y provoca una transformación más lenta y limitada en EPA, que inhibe la aparición de procesos inflamatorios.

Dicho sea de paso: el Erb-Muesli está desarrollo de tal manera que compensa esta mala proporción y cubre las necesidades diarias de «omega-3 antiinflamatorio», tan esencial.

El ácido eicosapentaenoico (EPA) es un ácido graso omega-3 poliinsaturado. Desempeña un papel fundamental en distintos procesos metabólicos, sobre todo en los inflamatorios.

Fuentes:

El EPA se encuentra sobre todo en pescados grasos de agua fría como el salmón, el atún, la caballa, las sardinas o el arenque del Atlántico. También podemos encontrar preparados de aceite de pescado como suplemento dietético.

Las personas que siguen una dieta vegetariana o vegana pueden evitar estos preparados de aceite de pescado y consumir en su lugar preparados de algas si lo necesitan o es recomendable.

El cuerpo es capaz de sintetizar EPA a partir del ácido alfa-linolénico. Sin embargo, esta síntesis se puede ver perjudicada debido a la ingesta excesiva en las dietas actuales de ácido linoleico (LA, ácido graso omega-6) a través de aceites de germen de cereal, aceite de girasol y de margarinas.

Si la actividad enzimática es deficiente por carencias frecuentes de micronutrientes, interacciones entre nutrientes o influencia hormonal, la síntesis de EPA a partir de ácido alfa-linolénico se produce muy lentamente y en pequeña cantidad. Por este motivo, desde la perspectiva actual se considera que EPA es un compuesto semiesencial.6,7,8,9

Del artículo de Wikipedia en alemán: Un estudio concluye que el consumo de aceite vegetal rico en ácido alfa-linolénico, unido a una dieta baja en ácido linoleico, aumenta los niveles de EPA en los tejidos igual que lo hace un suplemento de aceite de pescado.11

Las microalgas como Monodus subterraneus, Chlorella minutissima y Phaeodactylum tricornutum son la fuente de los suplementos veganos.12

Lectura obligatoria, no solo para vegetarianos o veganos:
Los veganos a menudo comen alimentos poco saludables. Errores nutricionales evitables.

Pérdidas durante el almacenamiento y la preparación:

los ácidos grasos omega-3 son muy sensibles a la oxidación. Los aceites ricos en ácido alfa-linolénico (ALA), como el aceite de linaza, deben almacenarse protegidos de la luz, del agua y del oxígeno del aire, no deben calentarse a altas temperaturas y lo más recomendable es consumirlos al poco tiempo. Preste atención a la calidad del aceite de linaza. La expresión «prensado en frío» es un sello de distinción entre los aceites, pero cualquier temperatura que supere los 40 °C, como suele ocurrir durante el prensado a alta presión, puede destruir los ácidos grasos omega-3.

Lo mejor es utilizar directamente las semillas, que habrá que moler o triturar no muy fino antes de su consumo. Sin embargo, una vez molidas o trituradas las semillas son muy sensibles a la oxidación y deberían disfrutarse en el momento, nunca guardarlas durante días, ni siquiera horas. Si desea evitar el ácido fítico que contienen, una buena manera de reducirlo es introducir las semillas en zumo de limón o de naranja. Eche un vistazo a la receta del Erb Muesli.

Alimentación y salud:

El organismo sintetiza ácido docosahexaenoico (DHA, ácido graso omega-3) y eicosanoides a partir de ácido alfa-linolénico (ALA). Los eicosanoides son cruciales para el sistema inmunológico, la coagulación de la sangre, la regulación de la presión arterial y la frecuencia cardíaca.

Necesidades diarias a largo plazo:

Hasta el momento no existen valores de referencia en cuanto a la ingesta diaria recomendada de ácido eicosapentaenoico (EPA) ni de ácido docosahexaenoico (DHA). La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) ha adoptado la cantidad de 250 miligramos como requerimiento diario en adultos sanos. La proporción de ambos ácidos grasos LA y ALA es decisiva y no debería ser superior a 5:1, y siempre es mejor si es de 2:1 o 1:1 (Dr. Greger).

Lo ideal sería consumir 30-40 gramos de pescado al día, es decir, consumir pescado dos veces a la semana.13 Una ingesta adecuada de EPA y DHA es crucial durante el embarazo y la lactancia, ya que ni el feto ni los niños pequeños son capaces de sintetizar EPA y DHA por sí mismos.10 Encontrará más información al respecto en el artículo sobre el ácido docosahexaenoico (DHA), también en nuestra página.

Síntomas de deficiencia:

Apenas se conocen deficiencias de ácidos grasos omega-3 que se manifiesten de forma clínica. Sin embargo, que se produzcan en silencio no significa que no tengan efectos perjudiciales igualmente. Por ejemplo, la neuropatía sensorial, las inflamaciones sangrantes y escamosas de la piel y del cuero cabelludo, los problemas de cicatrización de heridas y los trastornos del crecimiento podrían atribuirse a una deficiencia de ácidos grasos omega-3. En casos de caquexia, una ingesta mayor de ácidos grasos omega-3 puede mejorar el estado general del paciente.

Sobredosis:

Mientras la ingesta total de grasas no supere el 30 % de las calorías totales o se consuman ácidos grasos omega-3 por separado, no hay de qué preocuparse. A largo plazo, una intesta excesiva puede aumentar los niveles de colesterol LDL, deteriorar los sistemas de inmunidad innata y adquirida en personas mayores e incrementar la tendencia al sangrado. A largo plazo, unos niveles séricos elevados de EPA y DHA también acrecientan las tasas de mortalidad derivadas de problemas cardiovasculares en personas con este tipo de afecciones, así como el riesgo de padecer cáncer de próstata.

Funciones en el organismo:

El EPA es precursor de los eicosanoides y, por lo tanto, está involucrado en numerosos procesos metabólicos. Los eicosanoides son sustancias similares a las hormonas formadas a partir de ácidos poliinsaturados y cuya longitud de cadena es de 20 átomos de carbono, Entre los que se incluyen prostagladinas, prostaciclinas, tromboxanos y leucotrienos.

Durante la transformación de ALA en EPA están implicadas las mismas enzimas que producen (DGLA, enlace en inglés) y ácido araquidónico (AA) a partir de ácido linoleico. El cuerpo utiliza DGLA para producir eicosanoides antiinflamatorios y, al mismo tiempo, produce eicosanoides inflamatorios a partir del ácido araquidónico (AA).

A diferencia del LA, el ALA muestra una mayor afinidad con estas enzimas. Una ingesta suficiente de alimentos ricos en ácido alfa-linolénico produce un aumento de la síntesis de EPA y una reducción de la de ácido araquidónico. Para mantener un correcto funcionamiento de las enzimas es necesario contar con unos niveles adecuados de magnesio, calcio, vitamina B6, biotina y zinc.6,7,8

Los ácidos grasos omega-3 son vasodilatadores, de modo que previenen la aterosclerosis y contrarrestan la formación de coágulos (trombosis).
Se está empezando a comprender por qué los ácidos grasos omega-3 pueden combatir la esclerosis. Durante la esclerotización se producen inflamaciones crónicas en los vasos sanguíneos. Esto resulta en estrechamientos que pueden llegar a ser mortales. Por lo general, el organismo es capaz de iniciar o terminar estos procesos inflamatorios gracias a sus mecanismos regulatorios.

Las hormonas tisulares locales desempeñan un papel fundamental en el bloqueo inflamatorio. Derivan de los ácidos grasos omega-3 y se comunican con los macrófagos migratorios (fagocitos). Estos macrófagos eliminan las inflamaciones y, del mismo modo, pueden llegar a evitar la cronificación de los procesos ateroescleróticos.4

Algunos estudios científicos modernos sugieren que el EPA también fomenta un estado emocional positivo. Se dice que alivia la ansiedad, la depresión y los síntomas de la esquizofrenia. Un metaanálisis de 28 ensayos controlados aleatorios sugiere que el EPA sería significativamente más eficaz que el DHA en el tratamiento de la depresión.5

Absorción y metabolismo:

En comparación con los hombres, las mujeres parecen sintetizar EPA de forma más eficaz a partir del ácido alfa-linolénico (ALA), algo que se debe a los efectos de los estrógenos.1 Mientras que las mujeres jóvenes sanas son capaces de convertir en EPA el 21 % del ácido alfa-linolénico que consumen a través de la alimentación,2 los hombres jóvenes y sanos apenas aprovechan el 8 %.3

Para que se produzca la síntesis propia en el organismo es necesario realizar suficiente actividad física y contar con delta-6 desaturasa, delta-5 desaturasa y ácido graso elongasa. También hace falta piridoxina (vitamina B6), biotina, calcio, magnesio y zinc. En las dietas occidentales consumimos demasiados ácidos grasos omega-6 y omega-3 (sobre todo a través de los aceites) que afectan enormemente a esta actividad.13

Almacenamiento, consumo y pérdidas:

Encontrará una descripción muy detallada de EPA en la siguiente dirección vitalstoff-lexikon.de/Fettsaeuren/-Eicosapentaensaeure-EPA-/ (enlace en alemán).

Estructuras:

El ácido eicosapentaenoico (EPA) es un ácido graso poliinsaturado de cadena larga que, debido a la ubicación de sus dobles enlaces, pertenece a la serie de ácidos grasos omega-3. Sus sales y ésteres se conocen como eicosapentaenoatos. Otras denominaciones: ácido (5Z, 8Z, 11Z, 14Z, 17Z)-eicosa-5,8,11,14,17-pentaenoico; ácido icosapentaenoico (IPA) o ácido timnodónico. Fórmula molecular: C20H30O2. Número lipídico: 20:5 (ω−3).

Fuentes:

13 fuentes

En el mundo científico, usar Wikipedia como fuente es controvertido, pues a menudo sus artículos carecen de información bibliográfica (autoría) o esta no es del todo fiable. Nuestros pictogramas nutricionales incluyen las kcal.

  1. Burdge G: Alpha-linolenic acid metabolism in men and women: nutritional and biological implications. Curr Opin Clin Nutr Metab Care. 2004 Mar;7(2):137-44.
  2. Burdge GC, Wootton SA: Conversion of alpha-linolenic acid to eicosapentaenoic, docosapentaenoic and docosahexaenoic acids in young women. Br J Nutr. 2002 Oct;88(4):411-20.
  3. Burdge GC, Jones AE, Wootton SA: Eicosapentaenoic and docosapentaenoic acids are the principal products of alpha-linolenic acid metabolism in young men. Br J Nutr. 2002 Oct;88(4):355-63.
  4. Viloa, J. et. al., Resolving Lipid Mediators Maresin 1 and Resolvin D2 Prevent Atheroprogression in Mice, Circulation Research, 16 de agosto de 2016
  5. Julian G. Martens: EPA but not DHA appears to be responsible for the efficacy of omega-3 long chain polyunsaturated fatty acid supplementation in depression: evidence from a meta-analysis of randomized controlled trials. En: Journal of the American College of Nutrition. 28, 2009, pp. 525–542, PMID 20439549 (Review).
  6. Leitzmann C, Müller C. Michel P et al.: Ernährung in Prävention und Therapie. Editorial Hippokrates in MVS Medizinverlage Stuttgart GmbH & Co. KG (2005)
  7. Elmadfa I, Leitzmann C: Ernährung des Menschen. 4ª edición. Editorial Eugen Ulmer, Stuttgart 2004
  8. Muskiet FA, Fokkema MR, Schaafsma A et al.: Is docosahexaenoic acid (DHA) essential? Lessons from DHA status regulation, our ancient diet, epidemiology and randomized controlled trials. J. Nutr. Enero 1, 2004 vol. 134 no. 1 183-186
  9. A.P.Simopoulos, Importance of the ratio of omega-6/omega-3 essential fatty acids: evolutionary aspects, World Review of Nutrition and Dietetics 92 (2003), 1-23
  10. Biesalski HK, Fürst P, Kasper H et al.: Ernährungsmedizin. Nach dem Curriculum Ernährungsmedizin der Bundesärztekammer. 3ª edición. Editorial Georg Thieme, Stuttgart 2004
  11. E. Mantzioris, M. J. James, R. A. Gibson, L. G. Cleland: Dietary substitution with an alpha-linolenic acid-rich vegetable oil increases eicosapentaenoic acid concentrations in tissues. In: The American journal of clinical nutrition. Volúmen 59, número 6, junio de 1994, pp. 1304–1309.
  12. Rema Vazhappilly, Feng Chen (1998). "Eicosapentaenoic acid and docosahexaenoic acid production potential of microalgae and their heterotrophic growth". Journal of the American Oil Chemists' Society. 75 (3): 393–397.
  13. Kasper H: Ernährungsmedizin und Diätetik. Urban und Schwarzenberg, Múnich, 1996
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